«Hay varios motivos por los que nos oponemos a este protocolo. No es que esté mal que haya uno, pero el Ministerio de Seguridad ya contaba desde el año 2011 con un protocolo, que se elaboró previamente a la sanción de la Ley de Identidad de Género generando un importante antecedente, y cuya redacción había tenido en cuenta la opinión de las organizaciones LGBTIQ. Entonces, ¿cuál es la necesidad de que Patricia Bullrich presente uno ahora, días antes de que se realicen marchas y movilizaciones LGTBIQ en noviembre? Presentarlo en este momento no puede ser casualidad», manifestó la diputada Conde, presidenta de la Comisión de Mujer, Infancia, Adolescencia y Juventud y autora del proyecto.
«Este protocolo, más que apuntar a la protección de los derechos del colectivo LGTBIQ, parece estar dirigido a disuadir la realización de movilizaciones como la Marcha del Orgullo, reforzando los estereotipos de género e identificando al colectivo con la delincuencia. Hay que entender el contexto. No podemos olvidar la detención de la pareja de lesbianas en el subte por besarse ni las razzias del 7 y 8 de marzo pasados, en las que se detuvo a 7 lesbianas.», agregó la legisladora.
