Esta mañana, el partido kirchnerista Nuevo Encuentro presentó una denuncia penal por apología del delito contra el titular de la Aduana Juan José Gómez Centurión, a raíz de sus dichos públicos sobre la dictadura cívico militar. El escrito, que lleva la firma de la secretaria nacional de Derechos Humanos de Nuevo Encuentro Delia Bisutti y del apoderado de esa fuerza Sergio Zurano, en representación de la Mesa de conducción Nacional de dicha organización, sostiene que “para el ex militar cara pintada y actual funcionario del gobierno, los hechos por los cuales fueron condenados y denunciados algunos de los principales jefes militares de la época y sus consecuencia, se hallan absolutamente justificados como respuesta al momento político vivido y sólo puede objetarse un probable exceso en la ejecución de los mismos”. La denuncia fue presentada en el Juzgado Criminal y Correccional Federal Penal N° 4, a cargo del juez Ariel Lijo, y lleva el número de causa 1160/17.
En el escrito se solicita a la Justicia la apertura de una causa contra el funcionario macrista y la inmediata investigación de la comisión del delito de apología del crimen, de acuerdo a lo establecido en el artículo 213 del Código Penal de la Nación, en el que se prevén penas de un mes a un año de prisión para este tipo de accionar.
La presentación judicial asegura que “Gómez Centurión defiende la dictadura afirmando que no hubo un plan de exterminio, que no hubo genocidio, que se trató de una defensa institucional con algún que otro exceso” y agrega que “las palabras del funcionario público denunciado deben ser juzgadas con mucha más severidad que la de un ciudadano de a pie, ya que su supuesto predicamento, el lugar donde fueron expresadas y su inevitable y buscada difusión, contradicen, no sólo los fallos de la Justicia sino los más elementales derechos humanos”. “Gómez Centurión justifica, defiende y exalta la comisión de delitos de lesa humanidad repudiados por todos los hombres y mujeres de buena voluntad del mundo”, afirma la denuncia.
Según el escrito, “negar la existencia de un plan sistemático y definir al Terrorismo de Estado como “una reacción desmedida”, además de atacar la memoria del pueblo argentino, contradice a decenas de fallos judiciales de todos los tribunales del país en los que se juzgaron crímenes de lesa humanidad, y que han referido la existencia de un plan de exterminio. El funcionario justifica y defiende el procedimiento empleado, como respuesta en una guerra”. “El accionar perverso de “tirar los cuerpos al río”; de torturar; de desaparecer personas; de secuestrar; de asesinar, de apoderarse de bebés, es aquel que el funcionario Gómez Centurión pretende justificar; calificándolo únicamente como un posible exceso, tal como han proclamado algunos genocidas hoy condenados, no precisamente por excesos”, agrega la presentación.
En ese marco, Nuevo Encuentro argumenta que los dichos de Gómez Centurión objetan “la verdad histórica que estableció el Juicio de las Juntas al denunciar que “había un plan sistemático desde el Estado de desaparecer el cadáver para luego negar el crimen”, habiendo sido condenado como un hecho criminal la acción por la que se arrojaba a “condenados” ya muertos o vivos al Río de la Plata”. Del mismo modo, el escrito refiere a “los Fallos de los juicios de “Memoria, Verdad y Justicia” que también confirmaron un plan sistemático de exterminio por parte de la dictadura cívico militar que había usurpado el poder el 24 de marzo de 1976, autores de secuestros, torturas, robos, homicidios, allanamiento ilegal y falsedad documental, todos ellos delitos tipificados por el Código Penal vigente en el marco de la ejecución de ese plan sistemático concebido por la más alta jerarquía militar, quienes se aprovecharon de la usurpación violenta del poder que subvirtió el orden constitucional, que le garantizaba la impunidad”.
Finalmente, la denuncia sostiene que “en definitiva Gómez Centurión cometió el delito tipificado en el Código Penal como “apología del delito”. Las condenas judiciales probaron y definieron las acciones efectuadas en la última dictadura cívico militar como “un genocidio y un plan sistemático de desaparición”, pretender justificar dicho accionar es una acción típica antijurídica y culpable y debe ser condenada”.