Esta norma sancionada durante el gobierno macrista arrasó con el principio fundamental de una política de Estado en materia de cultura que había sido sostenida desde el regreso de la democracia y que es la asignación específica de fondos.
“En 2017 se fijó el vencimiento de las asignaciones de estos fondos para diciembre de este año y si eso no es modificado por el Poder Legislativo vamos a presenciar un desastre en nuestra industria cultural sin precedentes. No habrá trabajo ni producción en el INCAA, el INAMU y no habrá fondos para las bibliotecas populares del país”, subrayó la referente del espacio Roxana Pierpaoli.
Por otro lado Pierpaoli indicó que “No podemos dejar que llegue diciembre sin haber tratado esta Ley, porque no sólo se pondría en riesgo un capital simbólico como el cultural, sino que se afectaría enormemente a un sector que contribuye a la economía dando trabajo de manera directa e indirecta”, finalizó Pierpaoli.
“La soberanía cultural no es negociable, debemos afianzarla y defenderla para que el arte y la cultura cuente con los recursos necesarios para seguir creciendo y desarrollándose en todo el territorio de la Argentina”, expresaron desde la Red Cultural de Nuevo Encuentro en un comunicado.
