Desde Nuevo Encuentro manifestamos nuestra preocupación ante un nuevo lockout patronal impulsado por un grupo de grandes productores agropecuarios que, a través de una convocatoria poco clara, intentan no liquidar la cosecha y de esta manera negar el acceso a los dólares que el país necesita para seguir creciendo, con la fuerte intención de debilitar a nuestro gobierno.
Lamentablemente asistimos a una nueva maniobra desestabilizadora con la marca del macrismo, esta vez con la colaboración de un sector del campo que históricamente coincide con sus intereses económicos y financieros.
Resulta llamativo que la patronal pida estabilidad monetaria cuando en realidad son ellos mismos los que alimentan maniobras especulativas que agigantan la brecha cambiaria. Siendo este sector el que está históricamente detrás de la fuga de capitales.
Este mundo en conflicto está demandando lo que produce nuestro país, generando una gran oportunidad para potenciar nuestra producción alimentaria y energética.
Es en este momento que se necesita de mayor diálogo y no protestas que a las claras demuestra sus intereses económicos y políticos que van en contra de la gran mayoría de los argentinos.